Las árbitras chilenas hicieron su camino en el fútbol chileno e, incluso, ya disfrutan del merecido reconocimiento que les permite proyectarse en torneos internacionales.
Por Daniel Pérez Pavez
“Desde que hace diez años llegué desde Concepción hasta ahora ha habido un desarrollo importante en el arbitraje femenino”, sostiene Loreto Toloza Cravero, quien durante ese período ha sido protagonista del significativo avance de las mujeres en el referato nacional. “Yo estimo que en la actualidad son cerca de cuarenta profesionales en el país, pero además hay que considerar el importante crecimiento que se ha producido en el fútbol amateur”, precisa.
En este momento, el referato de la ANFP cuenta con cuatro árbitras -María Belén Carvajal, Dione Rissios, Monserrat Maturana y Madeleine Rojas – y cuatro asistentes en el fútbol rentado: Loreto Toloza, Leslie Vásquez, Cindy Nahuelcoy y Marcia Castillo, todas pertenecientes al plantel FIFA.
En diciembre de 2018, María Belén se convirtió en la primera en dirigir un partido profesional de fútbol masculino en Chile, cuando condujo el encuentro de la Segunda División entre Independiente de Cauquenes y Deportes Colcahgua.
En el caso de Loreto también existe un reconocimiento internacional en su categoría Fifa, que le permitió integrar, junto a Leslie, la terna encabezada por la propia María Belén en el Mundial Femenino de Francia. Previamente, en 2015 participó en el Mundial de Canadá, y un año después estuvo en los Juegos Olimpicos de Río de Janeiro.
Loreto le otorga un valor adicional a la irrupcion de las mujeres en la actividad: “El arbitraje femenino abre un espacio laboral para desarrollarse en lo personal y profesional; la calidad de vida te mejora en el aspecto de salud, alimentación y distintos aspectos, y te desarrolla bien como persona”, enfatiza.
Además, garantiza que “estamos bien preparadas y actualizadas, entrenamos tres veces a la semana, tenemos charlas técnicas constantes y diría que el perfil profesional se cumple plenamente. viajamos a dirigir al extranjero y, por supuesto, siempre la aspiración mayor es participar en los mundiales”.
El medio también ha sido receptivo con las jóvenes, admite Loreto: “Los jugadores nos respetan igual que a los árbitros varones y sus reacciones son similares. Yo diría que ha habido una excelente respuesta de todos a nuestra incorporación al profesionalismo e. Incluso, cuando hay que reclamar en la cancha, lo hacen sin problemas ni distinciones”, comenta sonriente.